Historia en los retales

Según la RAE retal es:

“Trozo de tela o de otro material que sobra después de cortar una pieza mayor.

“Conjunto de pedazos sobrantes o desperdicios de tela, piel, metal, etc.”

Pero detrás de cada retal hay mucho más…hay historias, emociones, segundas oportunidades, tesoros, diseño, creatividad, valor (que no es lo mismo que precio)…

Hay veces que primero te viene una idea a la cabeza y de ahí vas tirando del hilo y te sale una nueva pieza o una nueva colección, pero otras veces es un poco al revés, tienes un material que tienes ganas de utilizar y le vas dando vueltas hasta que te sale un diseño y cuando estás creando este diseño te van viniendo ideas que lo enlazan todo y le dan forma, pues este es el caso.

Desde hace tiempo tengo en mi taller, guardados como oro en paño, todos los restos de los hilos de bordar punto de cruz de mi madre porque, aunque ahora ya no los hace, hace tiempo, cuando yo era adolescente, hizo varios cuadros que todavía tiene por las paredes de casa.

Desde siempre, las aficiones de mi madre han sido y siguen siendo el bordado y sobre todo la costura así que en mi cabeza siempre está relacionada con las agujas de uno y otro tipo.

Es más, de pequeña hizo todo lo posible por enseñarme a hacer punto, y como yo soy zurda, hasta “le daba la vuelta a la cabeza y a las manos” para enseñarme en mi sentido, como decíamos las dos…pero nunca me dio por ello. ¡Verás cuando le diga, que últimamente me llama mucho la atención el bordado y que tengo ganas de aprender! Jajaja.

El caso es que tenía todos estos hilos, pero no me apetecía dejarlos simplemente guardados en una caja, quería darles vida de alguna manera, así que he decidido utilizarlos para crear cuadernos.

Además de estos retales de hilos; de los distintos trabajos que voy realizando, van quedando también retales de telas y papeles, que no dan para poder hacer una pieza “en cadena” pero que también quiero utilizar, porque cada día tengo más claro, que los objetos no están hechos para estar guardados como si fuesen reliquias, sino que están para utilizarlos, darles vida y llenarlos de recuerdos porque, ¿qué sentido tendría acumular por acumular? ¿no crees?

Así que he diseñado unos cuadernos que he llamado así “Retales” porque están hechos de retazos de materiales muy especiales para mí y que espero que acaben convirtiéndose en objetos únicos también para ti.

Todos serán distintos y únicos, y eso les da más valor porque, cómo el que tú decidas quedarte no lo encontrarás en ningún lado, tendrá un hilo, un papel o un patrón de cosido distinto y además tú lo harás más exclusivo con lo que cuentes en su interior. Vamos, como las personas, que somos parecidas, pero todas distintas y ¡eso es lo que me encanta!

La verdad es que tengo que admitir, que para mí también es una gozada tener la libertad de diseñar algo distinto cada vez, tirar del hilo y ver donde me lleva la creatividad de ese momento. Porque cuando diseño, además de ver los distintos materiales que tengo, me imagino a un estilo de persona y lo creo específicamente para ella, confiando en que el cuaderno la encuentre después…Si es que soy de crearme muchas películas en mi cabeza jejeje.

Todo esto, aplicado en general, es una manera no solo de reutilizar, reparar o restaurar sino de cuidar lo que tenemos, lo que valoramos, de darle una segunda oportunidad y de crear nuevas historias, recuerdos, emociones, de volver a trasmitir las sensaciones que aportan cada material.

¿Te has parado alguna vez a pensar que muchas veces los objetos duran más que las personas? ¿Y que tener ese objeto o incluso darle una segunda vida es un modo de mantener en el tiempo los recuerdos y la esencia de la persona que lo poseyó?

¿Por qué guardamos como tesoros objetos de hace muchos años? No solo por sus materiales o diseño, sino porque es una manera de traerte un pedacito del pasado al presente. A mí me gusta mucho imaginarme como se creó, quien lo hizo, como trabajó los materiales…o simplemente a veces un objeto es muy importante para ti porque lo usó una persona a la que tú aprecias mucho y quieres que te acompañe en tu día a día.

Cuando estaba creando los tres primeros cuadernos, me puse a pensar como llamar a las piezas, que tuviese relación con todo lo que me había llevado a crearlas, y de repente se me vino a la cabeza una peli ¡del año 95! (si tengo que admitirlo, por si no lo sabes, cuando vi la peli era adolescente así que ya te digo que no cumplo ni 20, ni 30, ni 40).

Seguro que las que seáis más o menos de mi generación os acordaréis, se llamaba “Donde reside el amor” de Winona Ryder y era una comedia romántica ¡cómo no! en la que según se cosía una colcha de patchwork para la prota, se iban contando muchas historias. Y esa colcha era el regalo para su boda, cada “cuadrito” formado por retales de telas contaban una historia o tenían un significado.

Por todo esto decidí llamar a estos cuadernos así “Retales”, porque están formados por pedazos de materiales: hilos, telas, papeles de todo tipo. Algunos fragmentos por si solos tienen mucho valor, otros no, pero si te paras a pensar la combinación obtienes un bonito resultado.

Pues eso, como la vida, que no siempre las circunstancias que te tocan son las ideales, pero con un poco de sentido, esfuerzo e ilusión quizás obtengas un buen resultado. ¿O no te ha pasado más de una vez, que las cosas en principio no eran como te hubiesen gustado y luego con el tiempo descubres que fue por algo?

Como yo, que empecé estudiando totalmente por vocación arquitectura técnica, y una crisis y varias circunstancias después aquí estoy, escribiendo esto y siendo artesana del papel, como digo yo, y más feliz que una perdiz (no todo el tiempo eh, que esto es complicado de llevar adelante, pero me encanta).

Para terminar, te dejo dos extractos de la película:

“Los jóvenes amantes buscan la perfección. Los viejos amantes aprenden el arte de coser fragmentos juntos y de ver la belleza en una multiplicidad de parches. Cómo hacer un edredón americano…”

"Respecto a la confección de una colcha hay que elegir las combinaciones con cuidado. Una buena elección realzará la pieza. Una mala elección deslucirá los colores ocultando su belleza original. No hay normas establecidas, tienes que dejarte guiar por el instinto y tienes que ser valiente".

¿Creamos nuestros propios retales? ¡Vivan las segundas oportunidades, para los objetos y para cada uno de nosotros!

Eso si es sostenibilidad y exclusividad: reinventarse y crear objetos y momentos únicos con los materiales y las cartas que te da la vida.

Y sí, no me importa admitir que he sido y soy de las que se han dado panzadas de películas “ñoñas” en el cine y en casa…a veces es necesario un toque cursi en la vida ;o)

¡Feliz y remendable día!

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